El último campeón tiene a diferencia del resto, un peso adicional. General Saavedra es el equipo que marcó pautas en el último Zonal pero que también ha sufrido “recortes” y movidas internas, que hoy lo ponen en otro lugar. Y con la premisa de rearmarse, encontrar un equipo; ensamblar lo nuevo e intentando sostener la base que al “Parque” le regaló su última vuelta olímpica.
Con la llegada de Rodrigo “Oso” Amado, un exquisito ex futbolista surgido en la Comisión de Actividades Infantiles; el lazo futbolero inevitable de su padre Mario, un hacedor en el semillero de la CAI asumirá la responsabilidad de estar al frente por primera vez de un equipo de Primera División. En tiempos de cambio pero también de exigencia.“Las expectativas que tengo son buenas. Será la primera vez que voy a dirigir a un equipo de Primera y como siempre, trataremos de dar lo mejor. Por suerte, tenemos un equipo importante que fue el último campeón por lo que la expectativa es buena. El fútbol es dinámico. Siempre uno se prepara para dar lo mejor pero después, si la pelota no entra; pega en el palo y se va, ya es otra cuestión”, describe.

Se asume “contento” de estar en el lugar que ocupa y admite el compromiso de exigirse al límite en función de que el equipo logre alcanzar los objetivos. “La idea es tener buen juego y ser un equipo ordenado. Hay que darle rodaje a muchos chicos nuevos, tuvimos un par de amistosos que creo, jugamos de la mejor manera aunque siempre se puede mejorar”.
“Respecto a los refuerzos, vinieron varios jugadores. Es un equipo que tenemos que tratar de hilvanar en cuanto al juego que uno pretende. Casi todos son nuevos, se fueron muchos pero también vinieron futbolistas. Creo que en ese sentido, estamos bien y en condiciones de ser, no sé si protagonista. Saavedra tiene que tratar de ser el mejor, no sé si vamos a igualar la última campaña porque hay muchos equipos pero uno solo es el campeón”.
“Del resto de los equipos no tengo mucho que decir. Yo hablo con mis ayudantes y no soy tanto de mirar al equipo contrario, sino de enfocarme en el mío. Hay que ser ordenado, cada uno tiene que entenderse en cuanto a lo que tiene que hacer”, reconoce el “Oso”, flamante DT de Saavedra.

“Los rivales a vencer son todos. Hay que tenerles respeto porque cada uno tiene su juego y su impronta. Hay que afrontar los partidos con el máximo respeto pero también con la máxima intensidad y compromiso que hay que tener. El torneo va a ser muy difícil, en Saavedra quedaron cuatro o cinco jugadores; tenemos lesionados pero los rivales van a ser todos durísimos porque la Liga de Comodoro es jodida. Nosotros trataremos de imponer nuestro juego y estamos laburando para eso. El objetivo es estar lo más arriba posible, para eso se invirtió bien en algunas incorporaciones”.
“Jugué –agregó- muchos años al fútbol y uno lo entiende de la mejor manera, sin presión y con mucho compromiso y trabajo. Tratamos de laburar lo mejor posible, a veces se puede y a veces no. Si digo que queremos ser campeones, es muy difícil porque los equipos se refuerzan y por eso, sí queremos estar en el lote. Saavedra tiene la mochila de ser el último campeón y a eso, hay que tomarlo con el doble de ganas para afrontar lo que viene. Es largo el campeonato, subieron chicos de la Séptima que yo tenía y de la Reserva. Y eso es importante para el día de mañana. Hay que foguear a los chicos, mantenerlos y sostener la cantera del club que viene muy bien. Solo hay que darles la oportunidad de jugar y las suficientes herramientas”, finalizó.