El ministro de Justicia,Ā Mariano CĆŗneo Libarona,Ā tuvo un fuerte ida y vuelta con laĀ Asociación del FĆŗtbol Argentino (AFA)Ā por la implementación de lasĀ Sociedades Anónimas Deportivas (SAD)Ā en el paĆs.
El debate por la autorización del ingreso de capitales externos a los clubes deportivos ocupa la agenda del ente madre del fútbol argentino desde que Javier Milei asumió como Presidente de la Nación el pasado 10 de diciembre.
Entre varios idas y vueltas judiciales, quien salió a hablar sobre el tema fue el ministro de Justicia que declaró: Ā«El DNU estĆ” por sobre el Estatuto de AFA en una pirĆ”mide jurĆdica. Esta es una asociación civil privada. Ese DNU luego motivó una reglamentación que dice que hay un aƱo para que reglamenten su estatuto y dejen de prohibir este beneficio que tanto les produceĀ».
āSi la AFA no acata la medida estarĆa incumpliendo el estatuto, intervendrĆ” la IGJ, lo sancionarĆ”, se judicializarĆ”. Hay que entender que la norma dice ādenle la oportunidad a los socios de elegir libremente quiĆ©nes quieren que entre un capital privado, sea un 10, 20, 50,100% de que elijanāā agregó CĆŗneo Libarona.
Quien salió al cruce desde AFA fue el tesorero, Pablo Toviggino:Ā Ā«Las estrategias cambian y el resultado es el mismo.Ā A ocho meses de haber decretado la necesidad y la urgencia de imponer un cambio en el modelo del fĆŗtbol argentino,Ā los clubes siguen siendo de los socios. Ni siquiera el āgenerosoā plazo de un aƱo para adaptar los estatutos de AFA, establecidos por la reglamentación de una norma que en principio anunciaron como operativa (que solo revelen un cambio de estrategia que desvirtĆŗan la necesidad y la urgencia que motivó la norma principal), modificarĆ” la voluntad de nuestra Asamblea de integrarnos con asociaciones civilesĀ».
El dirigente hizo hincapiĆ© en las consecuencias de una intervención estatal que derivarĆan en unaĀ desafiliación de la FIFA.Ā La entidad mundial obliga a que se garanticen laĀ Ā«independencia y prevención de injerencias polĆticasĀ».
Ā«HabrĆ”n pasado 1 aƱo y 8 meses desde aquella necesidad y urgencia cuando los nuevos plazos se agoten, y no solo no habrĆ”n torcido ni viciado la voluntad de nuestros flamantes asambleĆstas para modificar los estatutos a su gusto, sino que tampoco podrĆ”n recurrir a su Ćŗnica solución que serĆ” unaĀ intervención administrativa que suspenda la vigencia de los estatutos de AFAĀ (propio de un rĆ©gimen dictatorial), sin pagar elĀ costo polĆtico de una inminente desafiliación de FIFAĀ que borre del mapa mundial nuestro mĆ”s preciado orgullo deportivo y culturalĀ» agregó Toviggino, hombre de confianza de Tapia.