ENTRENANDO PARA VOLVER, DEPORTIVO PORTUGUÉS PREPARA UN RÁPIDO REGRESO A PRIMERA

Con altas y bajas. Así se construye cualquier currículum futbolístico. Héctor Hugo Puntano tiene toda una vida enfocada en las canchas y sabe de procesos. Desde conformar equipos que ascendieron hasta asumir salidas inesperadas, las que en el fútbol no pueden explicarse demasiado. Se asume como un “DT” curtido, acostumbrado a las bravas, sin muchos […]

Redacción Mamba Sport

marzo 7, 2025

Con altas y bajas. Así se construye cualquier currículum futbolístico. Héctor Hugo Puntano tiene toda una vida enfocada en las canchas y sabe de procesos. Desde conformar equipos que ascendieron hasta asumir salidas inesperadas, las que en el fútbol no pueden explicarse demasiado.

Se asume como un “DT” curtido, acostumbrado a las bravas, sin muchos discursos, amante de la realidad y de “llegarle”a los futbolistas con un mensaje directo, sin humo, ni malas artes. Al frente del Deportivo Portugués reconoce la responsabilidad de “volver” lo más rápido posible a Primera División aunque con una base genuina, jóven y preparada para una categoría por demás exigente. Puntano vuelve a dirigir en Portugués, un club que conoce desde sus inicios con un objetivo claro: formar un equipo competitivo que permita hacer olvidar rápido el trago amargo de haber descendido. «Estoy acostumbrado, ya hace casi veinte años que dirijo y he pasado por varios clubes. Estuve acá en 2006 dirigiendo inferiores, cuando era todo tierra y no estaba el supermercado. Era todo campo y hoy es un club ordenado, con cancha de sintético, pasto, gimnasio; vestuarios bien armados. Tengo una oficina, la verdad, me siento comodísimo», explicó.

Reconoce que el plantel es corto y que no pudo reforzarse como hubiera querido aunque redobla la confianza en sus futbolistas. «Tratamos de armar un equipo porque quedaron pocos jugadores. La idea era tener dos o tres por puesto y somos cortos. Hay una base de once, doce jugadores preparados para jugar, pero el torneo es largo y hay que estar listos para todas las dificultades: canchas complicadas, arbitraje y la competencia misma. Yo tengo un grupo de jugadores que levantaba el teléfono y venían pero ésta vez no pude. Hay que trabajar abajo porque hay chicos que andan muy bien, hay que prepararlos para cuando falte un titular».

Con el ascenso como meta, en Portugués todo parece tener carácter de “desafío” y se advierte, un ciclo ambicioso. Se sabe que se jugará con rivales armados para pelear; con adversidades y con escenarios ásperos y poco aptos para los juveniles. “Se puede jugar con chicos que estén bien. No hay tanto misterio. Pero no cualquiera puede jugar a la pelota; hay que estar físicamente bien y hay que entrenar. Eso no se logra de un día para otro. Para ascender hay que ganar todos los partidos y para poder hacerlo, es necesario tener un equipo competitivo. Acá no hay muchos jugadores, pero sí una buena base. Estamos en esa búsqueda”.

«Cuando me llamó Guerreiro me planteó que ellos quieren ascender y devolver a Portugués a Primera». Y acostumbrado a las “bravas” Puntano junto a su cuerpo técnico, José Coyopay y el preparador físico Walter Carrizo asume lo alto que estará la vara para todo el grupo. «Tenemos muchas expectativas, estamos trabajando bien; en el club se acostumbra que el jugador de Primera entrene todos los días y eso es una ventaja respecto a otros donde les cuesta por temas laborales y porque los que están en el petróleo no siempre pueden ir».

En una mirada amplia del resto de los equipos de la Primera B, anticipa quienes serían los principales rivales a vencer. “Los que descendieron se han reforzado. Roca se ha armado muy bien, Ferro va a ser protagonista y Rada Tilly también. Y después están los equipos con cancha de tierra, donde jugar es realmente difícil. Y no es porque menosprecie esas canchas sino porque no es fácil a veces lidiar con el viento y las decisiones arbitrales. Los partidos los jugamos bien, los ganamos y estoy conforme pero ahora la verdad se verá cuando arranque el torneo», cerró.